El titular de la Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción (Sedronar), el sacerdote Juan Carlos Molina, ratificó en el Senado que “no tenemos pymes que producen drogas”, aunque reconoció que en el país hay “cocinas" que producen drogas "de mala calidad”, la mayoría de ellas ubicadas en el conurbano bonaerense.

En una reunión de comisiones para analizar el proyecto recibido de la Cámara de Diputados que crea el Plan Integral para el Abordaje de los Consumos Problemáticos, Molina afirmó a los senadores que “los informes internacionales dicen que no somos un país productor”, pero admitió que existen “cocinas que hacen estiramiento de mala producción”.

Aseguró que “nosotros no tenemos pymes que producen drogas, no existen en la Argentina. Sí cocinas que producen de mala calidad”, que suelen estar situadas en el conurbano.

Sobre la importación de precursores químicos, utilizados también para la producción de drogas ilícitas, Molina precisó que “estamos trabajando mucho en la trazabilidad” así como en la inscripción y registro en un sistema informático en el que, dijo, el Sedronar ha invertido gran parte de sus recursos para blindarlo para que no pueda ser penetrado por intrusos.

“Estamos sacando la mayor cantidad de operadores que hay con este tema”, aseguró el sacerdote, quien admitió que “hay resistencia” por parte de los agentes que están obligados a informar al registro.

El jefe del bloque del Frente para la Victoria, Miguel Angel Pichetto, planteó en la reunión la cuestión de la efedrina, un precursor que debe ser controlado por la Subsecretaría de Precursores Químicos de la Sedronar y cuya importación desde la India, recordó, tiempo atrás se había quintuplicado en apenas en dos años.

Pichetto estimó que lo ocurrido obliga a que haya “un control más estricto” de la utilización de efedrina en el país.

Además, cuestionó implícitamente a los jueces porque dijo "este es un mundo maravilloso” en el que “hace poco se ha soltado al narcotraficante peruano Marcos. Estamos esperando si la Justicia va a actuar y deportarlo de la Argentina”.

Molina puso énfasis en describir a los senadores la coordinación que tiene la SEDRONAR con la secretaría de Seguridad, competente en la lucha contra el narcotráfico, ministerios nacionales y gobiernos provinciales para abordar la problemática del consumo de drogas y las adicciones.

El senador radical Gerardo Morales le apuntó al sacerdote que “la vida no empieza cuando usted llega” y subrayó que “hubo una ausencia de política contra las drogas” en los últimos años de parte del gobierno nacional.

Luego, el jefe del bloque de la UCR preguntó acerca de las irregularidades que, al momento de asumir la Sedronar, dijo haber encontrado, a lo que Molina respondió que “cuando notamos las irregularidades, pedimos a la Sigen que haga los informes correspondientes. Si hay que hacer denuncias las haremos y hemos iniciado algunos sumarios internos”.

También manifestó a los senadores que “hemos frenado todo lo que hemos visto que no es regular y estamos reencauzando presupuestos”.

Sobre el proyecto de ley para abordar los consumos “problemáticos” que votó el año pasado la Cámara de Diputados y ahora tiene para tratar el Senado, el titular de la Sedronar consideró que “nos favorece un montón, porque enmarca en lo que ya estamos trabajando”.