El diputado nacional Sergio Massa consideró hoy que los linchamientos a ladrones ocurridos en los últimos días en esta Capital y la provincia de Santa Fe "aparecen porque hay un Estado ausente" y remarcó que "la sociedad no quiere convivir con la impunidad".

Al respecto, sostuvo que los casos de vecinos que atacan a golpes a quienes cometen algún robo "tienen que ver con los mensajes que se dan desde el Estado", por lo que afirmó que "el mensaje debe ser que 'el que las hace las paga' y no que da todo lo mismo".

El líder del Frente Renovador también indicó que "cualquier sociedad ordenada necesita de sistemas de premios y castigos" y reclamó que se garantice "el Estado de Derecho".

"Estas situaciones aparecen porque hay un Estado ausente y la sociedad no quiere convivir con la impunidad", sentenció Massa, quien pidió "trabajar para eliminar este tipo de reacciones de la sociedad a partir de construir con un Estado fuerte, que establezca reglas, premios y castigos".

Además, el ex intendente de Tigre sostuvo que "la gente necesita al Gobierno garantizando el Estado de Derecho y un sistema de sanciones que repriman las conductas al margen de la ley".

Críticas sciolistas

Desde el sciolismo, el senador Alberto De Fazio quien salió al cruce de las declaraciones del diputado. “Un dirigente como Massa, primero en las encuestas, candidato a presidente, justifica el apartamiento del Estado de derecho es algo insólito y no se puede permitir”, insistió el legislador.

De Fazio subrayó que el de Massa “es el mensaje del miedo” y que el ex intendente de Tigre “entiende que la manipulación del miedo le reditúa políticamente, y es una continuidad de lo que ha hecho a través del código penal, de la estigmatización de sectores sociales, y ese mensaje produce este tipo de cosas”.

“Hay que admitir que reditúa políticamente” reconoció De Fazio, aunque advirtió que el efecto “daña y es de corto plazo”. “Puede servir para ganar una elección, pero a la larga, uno termina como Mussolini”, remarcó.

En los últimos días, tres ladrones fueron atacados a golpes en Rosario, uno en Santa Fe y otro en el barrio porteño de Palermo.

El caso más dramático se produjo en Rosario, cuando un grupo de vecinos golpeó ferozmente David Moreira, de 18 años, quien murió luego de agonizar cuatro días.

La ex vicegobernadora de Santa Fe María Eugenia Bielsa calificó ayer este linchamiento como "una catástrofe" y manifestó que con este tipo de acciones "se han roto todas las reglas del consenso social".