Con el fallo de la Corte Suprema de Justicia de octubre del año pasado que declaró constitucional a la Ley de Medios, el Gobierno parecía tener todo encaminado para poder concretar el anhelo de desarmar al Grupo Clarín.

De hecho, el multimedios presentó su plan de adecuación con seis unidades independientes que fue aprobado por la Afsca aunque todavía falta que se resuelvan las transferencias de las unidades operativas.

Sin embargo, al Gobierno se le escapó un detalle no menor, que podría derribar toda la ingeniería para ideada en estos años para tener a raya al Grupo. Sucede que a través de la Anses el Estado posee el 9% del paquete accionario de la empresa que le permitió acceder a las asambleas y reuniones de los ejecutivos de Clarín -en las que Guillermo Moreno se cansó de protagonizar distintos shows-, activo estratégico que hasta el momento no se sabe cual será su destino cuando la actual conformación societaria del grupo se fraccione en seis nuevas corporaciones.

Según pudo saber LPO, la idea del Gobierno es volcar esa tenencia en las unidades 1 y 2. En la primera unidad se encuentran canal 13, la señal TN, Radio Mitre y la FM 100, entre otros medios, con lo que la convierte en la unidad con mayor audiencia y peso simbólico.

En tanto, la Unidad 2 incluye a la mayoría de las operaciones de Cablevisión y Fibertel, esto es, la principal fuente de ganancias del Grupo con casi el 80% de los ingresos.

Sin embargo, en el Gobierno reconocen que en la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual no hay ningún artículo que refiera a la posesión del acciones por parte del Estado en los medios privados -una de las tantas falencias de la norma-, pero se atajan afirmando que la decisión del destino de esas acciones la tomará el ministro de Economía, Axel Kicillof, en consulta con la presidenta Cristina Kirchner.

“Vamos a tener en cuenta lo económico para que las acciones rindan más pero también lo político, para que la Ley se cumpla", sostienen en la Casa Rosada.

Sin embargo, en el Grupo tienen otros planes. Además de las acciones que posee el Estado, otro paquete cotiza en las Bolsas de Buenos Aires y Londres y hasta ahora nadie había tomado nota sobre que opinan esos accionistas del desguace del activo en el que invirtieron.

El tema fue discutido en la reunión de directorio de ayer en la que participó Kicillof y previendo futuros reclamos, se aprobó que se intentará llegar a una solución “buscando preservar el mayor valor posible y minimizar el daño a los accionistas”.

Lo que está claro es que Clarín no dejará que la decisión sobre el destino de las acciones del Estado las tome Kicillof. En el Grupo ya plantearon que la determinación se tomará mediante una propuesta del directorio que se tratará en una futura asamblea extraordinaria, en la que el Estado es minoría y no tiene ninguna chance de imponer su criterio.

Por caso, el directorio de Clarín podría proponer que el paquete accionario de la Anses sea girado a otra unidad con menor peso a las codiciadas 1 y 2. De todos modos, en el Grupo aseguran que llegarán a un acuerdo “justo” con el Gobierno y que se está trabajando con "responsabilidad".