El proyecto de construcción de una planta de tratamiento de residuos que reemplace los cuestionados rellenos sanitarios de la Ceamse en Ensenada podría quedar en la nada. El grupo español Griño estaría negociando la rescisión del contrato de las obras que apenas comenzaron a realizarse en ese distrito. ¿El motivo? El gobierno provincial sólo giró 8 de los 41 millones de dólares que la empresa debería recibir para la construcción.

"La obra está frenada desde hace seis meses porque Scioli no gira los fondos", dijo el intendente de Ensenada, Mario Secco, aunque aclaró que la firma nunca le informó a su municipio que iba a abandonar la obra. "Lo que me dijeron ellos fue muy claro: ‘hasta que no nos paguen no volvemos a trabajar’”, aseguró.

Sin embargo, sectores ambientalistas de ese municipio denuncian que la empresa española ya estudia la rescisión del contrato.

El proyecto de una planta de tratamiento para resolver el problema de los 1.000 toneladas de basura que genera la región fue ideado por el intendente de La Plata, Pablo Bruera. Sin embargo, su construcción en la capital provincial fue rechazada por los vecinos. Luego de marchas y contramarchas, el jefe comunal no se animó a definir un lugar en su distrito y acordó con Secco la construcción en Ensenada.

Tras la licitación pública, el proyecto quedó en manos de una UTE integrada por las empresas SANEA (de grupo español Griño), ESUR y MGM (estás últimas de La Plata).

Por entonces, Bruera aseguraba que la planta se trataba de un sistema tecnológico nunca antes implementado en América Latina para el tratamiento de residuos sólidos urbanos. El jefe comunal aseguraba que estaría funcionando en el primer trimestre de 2012.

Pero las cosas serían más complejas. El gobierno de Scioli aportó 8 millones de dólares para el inicio de la obra y la compra del terreno donde se debe levantar la planta, a la vera de la Autopista Buenos Aires-La Plata, en territorio de Ensenada. Sin embargo, desde hace seis meses el predio está vacío y las obras no terminan de arrancar.

Los 33 millones restantes no aparecen.

El proyecto contemplaba el tratamiento de las 800 toneladas de basura que por día genera la capital provincial (la Ciudad de Buenos Aires produce 5.000), a las que se sumarán otras 300 que llegarán de Ensenada, Berisso, Brandsen y Punta Indio.

El 80% de la basura que debería ingresar a la planta se reciclará en materias primas para la fabricación de distintos elementos, combustibles para industrias como la del cemento y abono para la actividad agrícola. El 20% restante se compactaría y serviría como relleno para las distintas canteras que hoy constituyen un peligro.

Secco, un ultra K que asegura preferir a Sergio Capitanich como sucesor de Cristina y a Florencio Randazzo como gobernador no duda en responsabilizar a Scioli. “Yo llamé a la Provincia y estoy luchando para que aparezca el dinero. No hay otra cuestión, acá la empresa paró la obra porque no tiene la plata y Ensenada no puede pagar semejante cantidad de dinero”, dijo.