La incontrolable suba del dólar paralelo que se desató apenas comenzó el año tiene en apuros a los mismos funcionarios que llegaron para controlarlo: desde la llegada de Axel Kicillof y Jorge Capitanich al gabinete, el blue subió casi dos pesos y las reservas del Banco Central cayeron por debajo de la barrera psicológica de los 30 mil millones.

Mientras consultores y economistas miran con preocupación cómo se deterioran estas dos variables, comenzaron a realizar las proyecciones sobre cómo evolucionarán las reservas del Central durante este año.

Teniendo en cuenta los egresos por vencimientos de la deuda, importaciones de energía, autopartes e insumos para el polo tecnológico de Tierra del Fuego, la consultora Econometría calculó que el país llegará a diciembre con 22.600 millones de dólares en el Central. Ese número representa una caída de más de 7 mil millones de los 29.700 millones de dólares que existen hoy.

La consultora Elypsis, por su parte, ofreció una estimación más optimista. En diálogo con LPO, uno de sus directores, Ándres Azicri, aseguró: “En el año van a bajar 5000 millones de dólares y llegaríamos a diciembre con 25 mil millones. Pero depende muy fuertemente del precio de los commodities y la política de desendeudamiento que tome el gobierno durante 2014”.

Según Azicri, la fuga de dólares continuará, pero no llevará a una crisis porque los exportadores agropecuarios, que aún retienen parte de su cosecha, deberán liquidarla en algún momento del año para pagar costos internos. Ese ingreso de divisas significaría un gran alivio para el Central y funcionaría como un colchón para un ritmo de caída que puede llegar a los 100 millones diarios.

Pero las estimaciones de los economistas en 2013 terminaron por subestimar al número de reservas al que se llegaría en diciembre, y es muy probable que este año pase lo mismo.

Según averiguó LPO, cálculos internos del Banco Central esperan que 2014 cierre con 18.000 millones de dólares de reservas, una caída anual de más de 10 mil millones.

Blue y reservas, conectados

La estimación que realizan las consultoras tiene una gran importancia, además, por la interdependencia que el nivel de reservas en el Central puede tener con el precio de la divisa en el mercado paralelo.

De hecho, el actual pico cercano a los 12 pesos del blue tiene entre sus principales causas el nivel de reservas. Mientras las divisas no ingresan por la decisión política del gobierno de no devaluar repentinamente –y los exportadores se guardan la cosecha a espera de una cotización más favorable-, las reservas del Central siguen cayendo y terminaron por superar la barrera psicológica de los 30 mil millones.

El golpe de efecto que significó romper ese límite llevó a un aumento de la presión sobre el blue por parte de inversores intranquilos, que terminó generando el pico de esta semana.

Irónicamente, la devaluación paulatina que el gobierno estableció para devolverle competitividad a sectores como el agro y la industria produjo el efecto inverso: se frenaron las exportaciones.

“No haber devaluado de golpe está teniendo un costo económico para el gobierno: el comportamiento de los exportadores es esperar a que la depreciación, que ya es del 50% anualizada, les produzca mayores ganancias”, explicó Azicri. “Y terminó frenando el ingreso de divisas”, agregó.

El economista asegura que una devaluación de una única vez hubiese incentivado a los exportadores a liquidar sus cosechas y auspiciado el ingreso de divisas. Con un Banco Central más holgado, ahorristas e inversores hubiese presionado menos sobre el dólar blue y no tendría el precio al que se consigue hoy.