Oscar Centeno declaró que quemó los ocho cuadernos donde registró los detalles de las coimas que ayudó a trasladar mientras trabajaba como chofer de Roberto Baratta.
Lo hizo el viernes por la noche, durante la ampliación de su indagatoria ante el juez Claudio Bonadio, quien luego lo convirtió en un testigo protegido.
"Los quemé en la parrilla del fondo de mi casa", aseguró el chofer, según confirmaron fuentes judiciales a ClarÃn. Aunque no dio una fecha exacta, solo dijo que "fue en los primeros meses del año". Lo hizo, de acuerdo a su versión, porque las anotaciones "le estaban trayendo muchos problemas". Aunque los cuadernos ya no existan, la causa no corre peligro: el fiscal Carlos Stornelli aseguró que Bonadio "tiene prueba suficiente, sólida y abundante" para seguir avanzando.
Confirmado: no están los cuadernos, pero Bonadio apuesta al testimonio de Centeno
Tras escuchar la nueva versión de Centeno, Bonadio convalidó el pacto y firmó su excarcelación. El arrepentido obtuvo asà su libertad, aunque estará bajo custodia dentro del programa que dirige el Ministerio de Justicia.
La figura del imputado colaborador es la misma a la que se incorporó Leonardo Fariña -en la causa conocida como la Ruta del Dinero K-, y Alejandro Vandenbroele, apuntado como testaferro de Amado Boudou.
El jueves, el ex chofer habÃa admitido que los cuadernos eran de su propiedad. Fueron escritos por él y en ese marco, ratificó lo que en esas páginas habÃa consignado durante casi diez años, con una interrupción de tres años tras el fallecimiento de Néstor Kirchner.
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El juez Roy Bean tiene en sus manos la recontra fotocopia de la novela de Centeno. Cree que con eso, con los libros de entrada de la Casa Rosada, Olivos o algún ministerio, con el testimonio mismo del sargento, con las declaraciones del otro sargento (el de la Federica, Bacigalupo, que vendió a su amigo como carne podrida), con la detención de un grupito de empresarios o gerentes (que tiemblan de miedo porque nunca estuvieron en cana), puede en serio armar un proceso que convierta este chiquero en el país de la pureza y las buenas acciones.
Como circo, está bien: durará muchos meses, tal vez años. Pero si entre los presos no vemos ahí a la familia Macri (incluido el chanta que nos gobierna), está claro que esto es pura basura. Porque Franco, Mauri y algún hermano de este último son los campeones de la coima por la obra pública en la Argentina. Así que si esta banda criminal no está entre rejas, ¿de qué sirve todo lo demás?
No se olvida de la premisa de esta administración: No deje que la realidad te estropee una buena noticia. Y a mentir que a la gente le gusta. Después muchos ciudadanos van a salir a decir "no sabíamos nada" como los que apoyaron el golpe de Estado de 1976.
Nos estamos acercando a la paz de los cementerios, donde nada ocurre. y donde solo soplara en viento del olvido y la ignorancia sobre nuestra propia historia.