Sergio Massa, Florencio Randazzo y algunos los gobernadores peronistas exploran un armado de unidad en la provincia de Buenos Aires. Con ese objetivo, organizan una cumbre en agosto donde esperan mostrarse juntos por primera vez y dar una señal de avance en este proceso.

Como anticipó LPO, este camino arrancó con el acercamiento entre una parte del PJ y el Frente Renovador en la Legislatura bonaerense, una iniciativa motorizada por Diego Bossio, Bali Bucca y Pablo Kosiner, en un intento por replicar el bloque de Argentina Federal en la Provincia.

El trabajo más ambicioso al que apuestan esos diputados y el senador Miguel Pichetto es construir con Massa, Randazzo y algunos gobernadores un armado fuerte en el territorio bonaerense, para empezar a disputar la hegemonía de Cristina Kirchner.

Como supo este medio, decidieron convocar a un plenario que se hará durante los últimos días de agosto -aunque podría postergarse para la primera semana de septiembre- en Mar del Plata o San Nicolás. 

La idea de los organizadores es mostrar por primera vez a Massa, Randazzo, los gobernadores alineados con Argentina Federal e incluso algunos intendentes, trabajando en sintonía. 

Sin embargo, también admitieron a LPO que los avances general algunas tensiones, porque por ser el dirigente con más volumen político y mayor armado en la Provincia, un acto de este tipo consolidaría a Massa como el jefe en los hechos de este espacio en la Provincia. 

El peronismo de centro ahora arma un interbloque en Provincia con Massa

En este escenario, primero se barajaba primero la idea de que el tigrense, Randazzo y los gobernadores no participaran de esta cumbre, sino que se mostrara como un nuevo intento de confluir, motorizado por sus segundas líneas.

En la cumbre también podría estar el salteño Juan Manuel Urtubey, que participa de modo activo de las negociaciones a través de Kosiner, aunque tiene una disputa latente con el tigrense porque ambos podrían aspirar a la Rosada en 2019.

En la organización del evento dicen que podrían sumarse algunos intendentes del PJ, que por ahora siguen alineados detrás de Cristina. También hablan de que tienen el visto bueno de Juan Manzur (Tucumán), Juan Schiaretti (Córdoba), Gustavo Bordet (Entre Ríos) y Domingo Peppo (Chaco), entre otros, por lo que no descartan poder sumar a algunos para empezar a a mostrar esa adhesión.

Para el peronismo no kirchnerista, la Provincia es como un agujero negro en el que aún no pudieron desembarcar. El fuerte liderazgo de Cristina espanta a los gobernadores, que muchas veces anunciaron recorridas que no pudieron concretar y admiten que no logran hacer pie en ese territorio.

Por eso, hace un tiempo los gobernadores le pidieron de modo directo a Massa que se pusiera al frente del caos del peronismo en la Provincia y trabajara con ellos para avanzar en un armado fuerte para la próxima elección.

A cambio de aceptar ese desafío, Graciela Camaño ofició como vocera de su espacio y durante la última reunión en Córdoba le dijo a Schiaretti que necesitaban que los gobernadores se sumaran a un acto que tuviera a Massa como el principal orador.

Ese "gesto" aún no se concretó, pero avanzaron las reuniones entre Argentina Federal y los del Frente Renovador, que esperan poder hacer confluir a los máximos dirigentes en el próximo plenario.