Luis Garibaldi es docente y entre 2005 y 2010 se desempeñó como director de Educación en Uruguay, uno de los países de referencia en América Latina en materia de enseñanza. Durante su gestión el gobierno de Tabaré Vázquez impulsó el Plan Ceibal, una suerte de Conectar Igualdad oriental. Además, Uruguay está próximo a volver a discutir la creación de una universidad docente. Ese debate que lleva más de una década en el país vecino comenzó a producirse en la Ciudad de la mano de la creación de la Unicaba que impulsa el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta. 

La iniciativa generó controversia en la comunidad educativa local y Garibaldi fue uno de los expositores en una charla organizada por los críticos de la iniciativa. A pesar de ello, el maestro y profesor de lengua es uno de los impulsores de la universidad docente en Uruguay pero subraya las diferencias entre los procesos que se produjeron a ambos márgenes del Río de la Plata. "Cualquier transformación institucional requiere de un tiempo de debate y participación de los actores directamente involucrados", asegura a LPO desde Montevideo.

-¿Hace cuántos años que Uruguay debate la creación de la Universidad Nacional de Educación?

-La ley General de Educación de 2008 previó la creación de un Instituto Universitario de Educación. Para ello instaló una Comisión de Implantación con representación de varias instituciones involucradas que elaboró un Informe de cómo implantar una institución de esas características. Luego hubo dos instancias interpartidarias, dos Congresos de Educación y un proyecto de Ley que no reunió las mayorías constitucionales que se requieren para crear un nuevo ente autónomo (2/3 de ambas cámaras legislativas). Se creó un Consejo en forma transitoria, el Consejo de Formación en Educación que avanza en los aspectos sustanciales del carácter universitario y el Poder Ejecutivo a fin de 2017 presentó un nuevo proyecto de ley de creación de la Universidad Nacional de Educación. En resumen hace ya casi diez años que estamos en esta discusión.

- ¿Por qué el gobierno impulsa ese proyecto?

-Se entiende que la formación de los educadores -maestros, profesores, maestros técnicos, educadores sociales- deben tener una formación de carácter universitario, formándose en instituciones que crean conocimiento y puedan continuar estudios de postgrado.

-Usted apoya la iniciativa, ¿cuáles son los principales problemas que tiene la educación docente en Uruguay?

-En Uruguay este proyecto es apoyado por docentes y estudiantes de la actual formación en educación, por el partido de gobierno y fue acordado también con partidos de oposición. El debate no se encuentra en la necesidad de darle un carácter universitario a la formación docente, sino en la necesidad de no realizar un cambio únicamente de nombre y en las formas de gobierno de esa institución.

LPOLeonardo Carreño

-¿Cómo caracteriza esa formación?

-La formación de docentes en Uruguay mantiene aún muchos rasgos de la formación normalista, en el caso de la educación media muy centrado en la disciplina del profesorado correspondiente. Hay un cambio importante en las características de su matrícula, estudiantes de edades mayores, con otras experiencias de estudios universitarios previas, que trabajan y tiene responsabilidades familiares.

-¿Por qué una universidad podría solucionarlos?

-La institución universitaria se caracteriza por la investigación y la creación de conocimiento, por ofrecer ofertas con mayor flexibilidad y dotando al estudiante de mayor autonomía. Desde el punto de vista institucional implica autonomía y participación de los estudiantes en la toma de decisiones. Esto permite formar profesionales con mayor responsabilidad, habiéndose formado con docentes que investigan, por tanto incorporan la noción de conocimientos cambiantes y en permanente construcción.

-Por lo que conoce ¿Cómo considera la formación docente en la ciudad de Buenos Aires? ¿Es posible trazar paralelismos entre la formación de los docentes en Uruguay y de la ciudad de Buenos Aires?

-No tengo opinión formada al respecto. Nuestros Institutos tienen vínculos con varios institutos de formación docente de Buenos Aires y otras provincias argentinas, así como el Consejo tiene con Universidades de su país, como la UNIPE. Entiendo que las problemáticas y los desafíos son comunes. Reconocemos en universidades argentinas una mayor acumulación de investigación en educación de la que existe en Uruguay. Esto se ha reflejado en un importante número de investigadores argentinos participando en eventos, equipos de investigación y consultorías en Uruguay.

LPOLeonardo Carreño

-Se supone que la carrera docente tiene un alto nivel de deserción, ¿por qué una universidad solucionaría ese problema?

-Efectivamente es así. En nuestro Consejo apostamos a un conjunto de medidas que puedan reducir la deserción, los tiempos de cursado de las carreras, así como mejorar las tasas de egreso. Entre ellas, mayor flexibilidad en el currículo, menor carga horaria presencial y combinación con propuestas virtuales, una política creciente de becas estudiantiles y una amplia posibilidad de reválidas y reconocimientos de trayectos educativos realizados en otras instituciones, son algunas de esas mediadas. La mayoría de estas medidas son propias de instituciones universitarias, aunque también se pueden adoptar en instituciones terciarias.

-¿Qué opina sobre Unicaba?

-Prefiero no opinar sobre un proyecto de Ley de otro país. De todas maneras, siguiendo una tradición existente en nuestro país, señalo que cualquier transformación institucional requiere de un tiempo de debate y participación de los actores directamente involucrados.