El Gobierno nacional no aceptó revisar el aumento del gas como reclamaban sus socios de Cambiemos, pero le concedió a la UCR el prorrateo de la suba en los meses de mayor consumo, una de las propuestas que realizó Alfredo Cornejo.

Así lo anunciaron el propio Cornejo (que antes se reunió con Macri) y el diputado Mario Negri tras la reunión que mantuvieron con Marcos Peña, Juan José Aranguren y un representante de la Coalición Cívica, en lo que fue un intento de la Rosada para calmar los reclamos internos.

La concesión realizada ante los fuertes reclamos de los socios de Cambiemos parece bastante modesta. El Gobierno no modificará el porcentaje del aumento del gas y sólo aceptará diferir el pago a los tres bimestres de menor consumo. Incluso, Cornejo deslizó que se podría cobrar algún tipo de interés a ese financiamiento, aunque aclaró que sería "subsidiado". 

Se acordó el "aplanamiento de las facturas de los dos bimestres de mayor consumo" de gas, o sea mayo-junio y julio-agosto (el radicalismo había propuesto prorratear tres bimestres), y dispuso que se "podrá posponer el pago del último aumento en tres cuotas bimestrales para todas las facturas emitidas entre el 1 de julio y el 31 de octubre, meses de mayor consumo y que generaba preocupación", según explicó Negri.

"Se ratifica la tarifa social del gas, se impulsará una campaña de concientización de ahorro en consumo y se convocará de forma urgente al Consejo Federal Energético", agregó el jefe de bloque del radicalismo en la Cámara baja. 

A su turno, el gobernador de Mendoza celebró que el Gobierno aceptó "dos de las tres propuestas" que le acercó la UCR, una de ellas tendiente a "aplanar las tarifas del primer bimestre de más alto consumo del gas y prorratearlo en los bimestres subsiguientes" y, la otra, "postergar los cambios en lo que hace a la tarifa social".La propuesta radical contemplaba posponer las modificaciones en la estructura de la Tarifa Social por un bimestre, y aplicar en el 4to y 5to bimestre el aumento pero en forma progresiva.

Sin embargo, la Rosada no aceptó el pedido del radicalismo que tendría más impacto en los bolsillos de los consumidores. Esto era posponer el 50 por ciento de la última cuota de la Revisión Tarifaria Integral (RTI), pasando el mismo para que efectivamente se aplique en octubre del 2019.