El ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, y el intendente de Morón, Ramiro Tagliaferro, fueron abucheados este miércoles cuando expusieron en la audiencia pública por la ampliación del aeropuerto de El Palomar para que vuele la low cost Flybondi.

"He participado de muchas audiencias públicas y es la primera vez que me pasa esto", dijo Dietrich, fastidiado por las interrupciones en medio del litigio judicial que enfrenta al gobierno nacional con un grupo de vecinos de El Palomar. 

Como contaron fuentes presentes en la audiencia a LPO, después de ese episodio la jornada continuó con normalidad hasta que llegó el turno de Tagliaferro, donde los abucheos crecieron más hasta que se interrumpió el discurso y comenzaron los incidentes.

Hernán Sabbatella, concejal kirchnerista de Morón, denunció que fue agredido por una "patota" que responde al intendente y que también hirieron a su par de Hurlingham Adrián Eslaiman y a la abogada Julieta Ferrari.

"La patota que nos atacó responde al intendente Tagliaferro y fue encabezada por Oscar Álvarez, ex presidente del Concejo Deliberante de Juan Carlos Rousselot, puntero y armador político del PRO en El Palomar", denunció Sabbatella.

Según el concejal, mientras el intendente defendía el "negociado" de Flybondi, la patota lo tomó "por la espalda" y le rompió la ropa, como se ve en un video compartido por el medio local Primer Plano Online.

El edil presentó la denuncia que quedó radicada en la Fiscalía General del Departamento Judicial de Morón. "Me agarro de atrás y me empezó a pegar, hay testigos", aseguró.

En tanto, la versión desde el entorno de Tagliaferro fue que una "patota sabbatellista" agredió a un vecino durante la audiencia. 

"Los concejales Sabbatella y Florencia De Luca, junto a un grupo de militantes, comenzaron a gritar en contra del aeropuerto. En ese momento, Sabbatella enfrentó al vecino Oscar Alvarez y una persona que lo acompañaba (de barba y anteojos) lo agredió en la cara generando disturbios en el lugar", explicaron e informaron que la denuncia fue radicada en la Fiscalía Nº 7 del Partido. En el entorno de Sabbatella replicaron que no era un "vecino" sino un empleado de Tagliaferro.