La Justicia brasileña confirmó este miércoles la sentencia por corrupción contra el ex presidente Lula da Silva, primero en las encuestas para las elecciones presidenciales.

Por unanimidad, el Tribunal Regional de Porto Alegre integrado por los camaristas Joao Pedro Gebran Neto, Leandro Paulsen y Victor Laus ratificó la condena por 9 años y medio de prisión.

La unanimidad del Tribunal golpea las aspiraciones electorales de Lula, ya que un resultado 3 a 0 le resta capacidad de apelaciones y achica el margen para la inscripción en la justicia electoral.

Lula, de 72 años, fue condenado en julio de 2017 por aceptar 3,7 millones de reales (1,18 millones de dólares) en sobornos de la firma de ingeniería OAS. El caso involucra un apartamento en el balneario de Guarujá. Ahora el líder del PT tiene dos posibilidades de apelar, una herramienta que buscaba utilizar para estirar el proceso hasta después de las elecciones de octubre. Pero una ley aprobada durante su propio mandato prohíbe las candidaturas de aquellos postulantes que tengan un fallo en contra en segunda instancia.

Decenas de miles de partidarios protestaron en las calles contra lo que ven como una persecución política al icono de la izquierda brasileña, que fue condenado en primera instancia por el juez Sergio Moro. El propio Lula convocó a un acto en la plaza de la República, en San Pablo, para repudiar el fallo junto a miles de manifestantes.

La presidenta del PT, la senadora Gleisi Hoffmann, afirmó que la ratificación de la condena es parte del "golpe" que destituyó a Dilma Rousseff y defiende "intereses de la élite brasileña".

"El corporativismo se sobrepuso a la Constitución, a la legalidad y a la democracia, sustentando el golpe y los intereses de la élite brasileña", dijo Hoffmann en su Twitter. El fallo fue mucho peor de lo que esperaban en el entorno de Lula, en donde al menos esperaban que uno de los tres jueces votara en disidencia.

Paradójicamente, el fallo del Tribunal hizo acelerar la candidatura de Lula, que aún no se había oficializado pese a que era un hecho indiscutible desde hacía meses. En ese sentido, el PT anunció esta tarde que inscribirá ante la justicia electoral la candidatura del ex presidente al considerar una "farsa" el proceso judicial.

El petista Jaques Wagner.

"El resultado judicial con el voto claramente acordado entre los tres camaristas configura una farsa judicial, orquestada por la cadena Globo, con el objetivo de sacar a Lula del proceso electoral", dice el comunicado.

Al mismo tiempo, el fallo activó el plan B del PT, ante la fuerte posibilidad de que la candidatura de Lula no sea admitida por el tribunal electoral. Es por eso que en Brasil ya empezó a hablarse de otros nombres como el de Jaques Wagner, ex gobernador de Bahía.

El plan B del PT ya se empezó a paladear frente al riesgo de perder bancas contra quien es el candidato opositor con mayores chances de ser presidente si no compite Lula: el ex militar Jair Messias Bolsonaro, la opción del establishment.

Bolsonaro es el candidato más polémico de la historia reciente de Brasil y sus declaraciones siempre fueron noticia. Llegó a decir que los negros "ya no sirven ni para procrear" y que él "sería incapaz de amar a un hijo homosexual", que las mujeres deben ganar menos dinero "porque se embarazan y pasan seis meses de vacaciones" y que el "gran error" de la última dictadura "fue torturar y no matar". Tras el fallo del Tribunal, Bolsonaro se sacó una foto festejando junto al televisor.