El nuevo horario del subte arrancó con serios problemas para los usuarios, que sufren demoras y cancelaciones en todas las líneas por un reclamo de los metrodelegados contra la modificación impulsada por Metrovías y el Gobierno porteño.

No obstante, desde los metrodelegados negaban estar realizando alguna medida de fuerza contra el cambio de horario y aseguraban que las demoras y cancelaciones se deben a problemas operativos por cambios en los cronogramas de trabajo.

Aparentemente, el problema fue que muchos conductores no acataron el cambio de horario y daban por terminado su turno en el viejo esquema, sin respetar la media hora que se corrió el cronograma. Así, las demoras o cancelaciones eran por lapsos cortos, pero provocaban problemas para los usuarios, que viajaban en trenes abarrotados.

Los metrodelegados habían rechazado el cambio de horario (proponen que se extienda de 5 a 1, mientras que a partir de hoy funciona de 5.30 a 23.30) y habían advertido que el servicio "no se podrá brindar en forma correcta" por problemas técnicos y operativos, que al parecer no se pudieron evitar.

Además, desde el gremio decían la semana pasada que Metrovías no había notificado a los guardas y conductores del nuevo horario. "La empresa mandó a algunos trabajadores un telegrama notificando que el subte modifica media hora su servicio, pero no le dicen a que hora tiene que ir", explicó la semana pasada un vocero a NA. "El horario habitual de un trabajador vespertino es de 17:00 a 23:00 y si no se preparó con tiempo la plantilla de personal ¿quien va a trabajar hasta las 23:30?", alertaron.

Metrovías les respondió con un comunicado en el que calificaron de "inverosímil" que no tuvieran conocimiento de la implementación del nuevo horario y afirmaron que se mantuvieron más de 20 reuniones con los diferentes gremios para informar y programar el cambio.