La suba de impuestos al vino y a las bebidas azucaradas planteada en el proyecto de reforma fiscal elaborado por el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, ya empezó a generar polémica en las provincias productoras.

Esto porque en el rubro "Vinos y Sidras" de la iniciativa oficial se contempla una alícuota del orden del 17% cuando actualmente se encuentra en 0%, mientras que en "Gaseosas y otras con azúcar" el impuesto aumenta del 8% al 17%.

El primero en salir al cruce fue el diputado José Luis Gioja. "Los funcionarios no tienen la más mínima idea de lo que pasa más allá de la General Paz", apuntó el ex gobernador de San Juan donde se concentran una gran cantidad de productores y bodegas.

"No vamos a avalar ningún tipo de impuesto que resienta a la producción de la principal industria de nuestras provincias (las de Cuyo), de la que viven cientos de miles de familias y que mueve toda la economía de la región", afirmó Gioja.

En rigor, en las provincias viñateras están molestos porque, según la iniciativa macrista, el vino entra en la misma categoría que las bebidas cola y la cerveza cuando en realidad se trata de un producto de consumo familiar considerado un alimento.

En la misma línea, el presidente de Coninagro, Carlos Iannizzoto, aseguró a La Política Online que el aumento de impuestos al vino "va a incidir directamente en el consumo interno afectando a la industria, a los productores y a las provincias".

"Grabar una cadena de valor no está en línea con lo establecido por el presidente cuando habló de la necesidad de aumentar la producción y unificar el sistema impositivo", dijo Iannizzotto que se dedica a la producción vitivinícola en Mendoza.

"Este aumento de impuestos al vino nos golpea de lleno y lo único que va a lograr es que haya menos empleo y menos competitividad", advirtió el dirigente. "En este sector hay una cadena de valor y diferentes características respecto a otras industrias", agregó.

Por su parte, el Centro Azucarero Argentino (CAA) emitió este miércoles un duro comunicado criticando el proyecto de reforma fiscal de Dujovne. "Se generarán importantísimas pérdidas de puestos de trabajo en la cadena azucarera", alertaron.

Los directivos del CAA estimaron que se perderán alrededor de 5 mil puestos de trabajo solo en el sector azucarero concentrado mayormente en el NOA. "El incremento de la recaudación impositiva no será directo debido a la reducción del consumo", sostuvieron.

Cabe mencionar que la iniciativa oficial -que debe ser aprobada por el Congreso- dispone una suba de 9 puntos (del 8% al 17%) para las bebidas azucaradas, al tiempo que elimina el impuesto para las gaseosas sin azúcar que se ubica hoy en un 4%.

"La medida es discriminatoria en contra del azúcar y claramente promueve una sustitución de insumos nacionales por otros importados de dudosos beneficios para la salud humana", consideró el CAA.

Como si todo esto fuese poco, la Cámara de Alcoholes (que representa al sector de Tucumán, Salta y Jujuy) apuntó contra la Casa Rosada por reducir un 29% el precio del bioetanol mediante la resolución 435-/2017 publicada este miércoles.

"Esta medida es un golpe brutal al sector productor de biocombustibles con origen en caña de azúcar", remarcó la entidad. "El sector genera 50 mil empleos directos y 200 mil indirectos en el NOA con más de 6 mil cañeros, proveedores y contratistas", añadió.

Raúl Robín, presidente de Economías Regionales de la CAME manifestó que "el Gobierno debiera rever esta decisión porque se trata de un sector que, no solo genera beneficios económicos, sino también ambientales por su carácter de verde y renovable".