La calificadora internacional Standard & Poor's advirtió que el desafío independentista de Cataluña podría provocar una caída en recesión de la región más rica de España, afectada principalmente por la fuga de grandes empresas.

A pesar de las advertencias que ya habían realizado el Fondo Monetario Internacional y otras agencias calificadoras, la de S&P tiene como novedad que es la primera vez que considera la posibilidad de que la economía de la región entre en recesión, incluso sin que se produzca la independencia.

"Cataluña tendría el mayor impacto, posiblemente podría conducir a una fuerte desaceleración o tal vez una recesión", indicó S&P, que detalla que hasta ahora nadie consideraba esa alternativa porque se trata de una economía muy dinámica.

Según El Confidencial, S&P sostiene que Cataluña no se independizará, no solo por la dificultad de separarse de España, sino también porque necesitaría el reconocimiento de otros Estados a su declaración, y la agencia cree que no tendría el respaldo de muchos países y ninguno de Europa.

Pero aún así, la incertidumbre política -tras la sinuosa declaración de independencia realizada el martes por líder catalán Carles Puigdemont- podría llevar a una "sostenida caída en la confianza de las empresas y consumidores y una potencial interrupción de los negocios".

Este jueves la situación se había calmado tras 48 horas de extrema tensión, en parte por el impasse logrado con el acuerdo entre Mariano Rajoy y el Partido Socialista para reformar la Constitución, y también porque Puigdemont aún no respondió al pedido del Gobierno central para que aclare si declaró o no la independencia. De confirmarlo, daría lugar a Rajoy para aplicar el artículo 155 que le permite disolver el gobierno autonómico y llamar a elecciones anticipadas.

La cuestión económica fue determinante para que Puigdemont dejara en suspenso la declaración de independencia, afectado por la salida de Barcelona de grandes empresas. S&P advirtió especialmente sobre el "riesgo potencial para las operaciones" de los bancos con más exposición a Cataluña, que son Sabadell y CaixaBank. 

Por otro lado, también hace hincapié en los riesgos que la región caiga en cesación de pagos si se complica la "refinanciación completa y a tiempo de la deuda de Cataluña de corto plazo o se reduce la efectividad del apoyo financiero del Gobierno central a Cataluña".

La Generalitat tiene que hacer frente en el próximo mes a un vencimiento de préstamos con los bancos por valor de 290 millones de euros y, al tratarse de deuda de corto plazo, no puede refinanciarlo con el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA). En el caso de que no consiga abonar esta cuantía, o tenga que detraer recursos de otras partidas, todo podría precipitarse, indica El Confidencial.