Los resultados en Rosario reflejaron una doble sorpresa. Por un lado, Roy López Molina superó a Anita Martínez, la favorita en las encuestas, por 10 puntos y entre las dos listas cuadruplicaron los votos de Pablo Javkin.

Con el 90 por ciento de las mesas escrutadas, la suma entre Anita y Roy ubicaron a Cambiemos en el primer lugar con 150 mil votos mientras que el Frente Justicialista quedó segundo con 90 mil y lejos, el Frente Progresista que obtenía apenas 43 mil votos. La peor elección en más de 20 años de gobierno.

De hecho, estos números obligan al candidato oficialista a una hazaña mayor hacia las generales que la que tuvo que realizar la actual intendenta, Mónica Fein, en el 2015 cuando tuvo que remontar otro resultado adverso para retener el municipio.

"Es un triunfo de Cambiemos que cuadruplicó al oficialismo" sostuvo entusiasmado el diputado José Nuñez en diálogo con LPO y agregó que "el nuestro es un proyecto de poder, de gobierno que implica una Rosario inclusiva e inteligente".

Sin embargo, a pesar de la victoria contundente de Cambiemos, los climas en el bunker de Anita Martínez desentonaba con el del ganador de la interna, Roy López Molina donde se vivía una verdadera fiesta.

Es que la disputa al interior del PRO fue durísima donde no se privaron de acusaciones cruzadas y denuncias de todo tipo que escalaron desde el señalamiento por "el uso indebido de la imagen del presidente" hasta el reparto de bolsones a cambio del voto.

En contra de todos los pronósticos, la lista auspiciada por el presidente del PRO de Santa Fe, Federico Angelini, dio el batacazo y superó por 10 puntos a la competidora. La sorpresa fue tal que en la última semana el objetivo de máxima de este espacio era acercarse lo máximo posible para que Anita no logre duplicarlos.

La estructura partidaria y fortísima presencia de militantes en las calles dio sus frutos y Roy se alzó con el 55 por ciento de los votos de Cambiemos. "Era el momento de acompañar a Roy y lo hicimos" sostuvo en diálogo con este medio Paco Orell, presidente de la juventud PRO quien declinó presentar una tercera lista para alinearse a Angelini.

Más dura fue la diputada Gisela Scaglia quien aseveró que "la política le ganó al marketing" y agregó que "ganó la honestidad y el compromiso con la ciudad, este resultado demostró que en política no hay que esconderse" subrayando el hecho que, según este grupo, Anita Martínez durante el año y medio que estuvo en el Congreso Nacional no volvió a Rosario.

Ahora, la incógnita está puesta en la manera en que los dos sectores deberán desandar las acusaciones y tensiones. En ese sentido, Orell consideró que "tiene que haber un acercamiento como lo hubo entre Larreta y Michetti luego de las PASO en Buenos Aires" en las elecciones anteriores.

En cuanto a las denuncias que dispararon desde el espacio de Anita, el coordinador de la juventud del PRO sostuvo que "no fue Anita sino que hubo gente que intentó cruzar una línea, colaboradores de ella" sin explicitar nombres.