La Orden de Abogados de Brasil (OAB) le pidió a la Cámara de Diputados de Brasil abrir el juicio político al presidente de ese país, Michel Temer, por el nuevo escándalo de corrupción desatado el jueves, cuando se conoció un audio suyo pidiendo coimas a sus legisladores.

Tras reunirse el sábado, la OAB, un símil al colegio de abogados de Argentina, informó que pedirá abrir un juicio político a Temer, el paso inicial para su destitución. Claro que, como ocurre en nuestro país, necesita que la Cámara baja lo habilite y no será fácil porque su presidente es Rodrigo Maia, un aliado del presidente.

De hecho, desde el viernes se amontonan pedidos de juicio político contra el presidente, que resiste en su cargo e insiste en que los audios están editados.

Si dejara el cargo, la Constitución brasileña prevé que el Congreso designe en una elección indirecta a su sucesor, quien gobernaría entonces hasta el 1 de enero de 2019, cuando asumiría el ganador de los comicios del año próximo.

No le será fácil continuar. Ya perdió 32 diputados del Partido Socialista Brasileño (PSB) que daban sustento a su gobierno y que es la fuerza del fallecido candidato presidencial en 2014 Eduardo Campos.

Y su principal aliado, el senador Aecio Neves, fue suspendido de su cargo por la corte suprema acusado de planificar con el mandatario acciones en el más alto nivel.

Varias manifestaciones estaban programadas para este domingo con el fin de reclamar elecciones directas para elegir un nuevo presidente, un trámite que requiere un acuerdo en el Congreso para una enmienda constitucional.

En caso de renuncia, la cámara baja de convocar a elecciones indirectas, es decir, de candidatos elegidos por el Congreso.