La madrugada de este martes fue anunciada la detención de Dámaso López Núñez, en la Ciudad de México, presunto sucesor de Joaquín "el Chapo" Guzmán, al frente del Cártel de Sinaloa, conocido como "el Licenciado".

El operativo a cargo de la fuerza militarizada de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) y de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de la Procuraduría General de la República (PGR), en coordinación con elementos Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), se realizó en la colonia Nueva Anzures, en la frontera con Los Pinos en Chapultepec.

López Núñez se encontraba en compañía de su esposa Rocío al momento de su detención, en el residencial Hares, un complejo de lujo sobre la avenida Ejército Nacional. De manera simultánea otro grupo de la SEIDO realizó otro operativo en otra parte del DF, en la delegación Azcapotzalco, donde detuvieron a Víctor Geovanny González Sepúlveda, "el Chompiras", cerebro financiero del cártel.

La captura del Licenciado, acusado de haber ayudado a escapar al Chapo en 2001 mientras estaba recluido por primera vez en el penal de Puente Grande, ha sido recibida como una importante victoria política por el gobierno de Enrique Peña Nieto. Pues presuntamente "El Licenciado" logró hacerse con el control del Cartel de Sinaloa luego de ayudar al hombre de Badiraguato en su fuga.

Su traslado entre dependencias oficiales de la Ciudad de México, incluyó largos convoyes de camionetas blindadas y un despliegue de policías militares con ametralladoras; una imagen habitual en los estados fronterizos, pero no en la Capital de la República.

Reacciones y reordenamiento

Entre las primeras reacciones, el mandatario federal a través de su cuenta oficial Twitter mandó el siguiente mensaje: "Seguiremos trabajando con determinación y compromiso, en coordinación con los gobiernos locales, para hacer frente a los retos de seguridad", escribió Peña Nieto.

Por su parte, el jefe de gobierno capitalino declaró a la prensa que "la Ciudad de México es un centro en donde puede haber logística o donde puede haber reforzamientos financieros... Lo que estamos luchando y lo que estamos evitando a toda costa es que la Ciudad de México se pueda volver un centro de operación", afirmó Miguel Ángel Mancera.

El especialista en temas de seguridad de la UNAM, René Jiménez Ornelas, compartió la opinión de Mancera Espinosa, y añadió que la CDMX no sólo es el centro financiero de México, sino de otros países, como Guatemala y varias naciones más de Centroamérica.

Para el doctor del Instituto de Investigaciones Sociales, con el arresto de Dámaso estamos frente a un "reajuste al interior de la estructura del Cártel de Sinaloa, sin que ello implique un impacto a la organización del grupo delictivo. Un reajuste que inició con la última captura del Chapo y finalmente su extradición".

En el mismo tenor, Jiménez Ornelas aseguró que este tipo de detenciones "espectaculares pero sin que se detone un solo cartucho" tienen un tinte electoral para la actual administración, y vaticinó que acaso su hijo (Dámaso López Serrano, "el Mini Lic") tome su sitio en cártel, así como lo hicieron Iván Archivaldo y Alfredo Guzmán Salazar con el lugar vacío que dejó el "Hijo de la Tuna" el pasado 8 de enero de 2016.