El primer paro nacional contra Mauricio Macri tiene una adhesión dispar en el Conurbano: mientras que en los municipios kirchneristas dicen que es "casi total", en los macristas promovieron que los empleados municipales trabajen "con normalidad", pese a que reconocen que no les descontarán el día a quienes no asistan.

El panorama varía de acuerdo a cada municipio. Si bien en todos hay cortes de ruta combinados con gente que quiere adherir al paro y otra gente que decide ir a trabajar, la adhesión era mucho mayor en municipios de signo peronista, mientras que los empleados públicos que cumplían sus funciones normalmente eran muchos más en los municipios de signo macrista, según supo LPO de acuerdo a información brindada por voceros de los distintos distritos.

Desde Morón, donde gobierna el macrista Ramiro Tagliaferro, aseguraron a este sitio que hay "muy buena presencia de empleados públicos". Según datos del municipio, hubo incluso gremios que reportaron una asistencia casi total, mientras que hubo otros de menor asistencia. En la Municipalidad llevaban una cuenta rigurosa de porcentajes de empleados y su asistencia según cada sindicato.

La Municipalidad había comunicado previamente a los empleados que se trata de "un día normal de trabajo, como todos" pese a que informó que contemplaría "la situación de quien no podía llegar al trabajo" por viajar en algún medio de transporte que se vea perjudicado por el paro. Tagliaferro incluso agradeció a los municipales que "decidieron ir a trabajar". 

Asimismo, LPO supo que tanto en Morón como en otros municipios macristas e incluso en ministerios y dependencias estatales, los empleados se organizaban en "pools" de autos -como los reconocidos pool escolares- para poder llegar al trabajo.  

"Hubo muchos casos de municipales que querían venir a trabajar, entonces se organizaron en autos para poder llegar todos", dijeron, en sintonía con lo que describió LPO sobre los funcionarios fueron en bicicleta y otros ofrecieron sus autos para llevar empleados al trabajo..

Aclararon que "la comunicación oficial fue que el municipio trabaja normalmente y eso se informó a secretarios, subsecretarios y para abajo". "No hubo imposición. Los funcionarios nunca dudaron en venir a trabajar". Incluso, desde el Twitter oficial del gobierno de Morón difundieron fotos de sus empleados públicos trabajando. 

En contraste con Morón, la información de los municipios cercanos del kirchnerismo adhirieron al paro desde la dirigencia municipal acompañando a gremios. En Moreno, donde gobierna el camporista Walter Festa, dijeron a LPO que el paro "es total". Adhirieron todos los gremios, dejaron guardias mínimas para servicios esenciales. Pero está todo parado y lo acataron todos los municipales. 

Festa, días atrás, había dicho que está de acuerdo con el paro y que debería haber sido mucho antes. incluso afirmó: "Políticamente adherimos al paro, yo creo que es un paro que fue a destiempo, que se tendría que haber hecho muchísimo antes, con todo lo que estaba pasando". 

 El intendente de Escobar, Ariel Sujarchuk, dijo a LPO que el acatamiento en su distrito es del 70 por ciento pero que todas las áreas trabajaron con guardias mínimas. También señaló que en las escuelas el acatamiento es "prácticamente total", pero aclaró: "Estamos garantizando los servicios básicos, como los hospitales". 

Otro caso similar se da en La Matanza, donde aseguraron que "los municipales están todos de paro". Según los reportes de la Municipalidad a este sitio, dicen que la huelga es "contundente". "No se mueve ni una hoja con el viento", dijo un vocero a LPO.  

En San Martín, Gabriel Katopodis también adhirió al paro y allí dijeron que funcionan sólo los servicios esenciales y urgencias, mientras que se atienden turnos "que ya estaban agendados".

Desde Avellaneda, municipio gobernado por el kirchnerista Jorge Ferraresi, dijeron que el paro entre los municipales tiene un acatamiento "que llega al 95 por ciento", mientras que una visión similar dieron en el entorno de Gustavo Menéndez, intendente de Merlo, donde el acatamiento es "total" y hay solamente una guardia de funcionarios en las dependencias.

La visión es diferente a la que brindaron en Lanús. En el municipio gobernado por el macrista Néstor Grindetti aseguran que la adhesión "no es masiva", y apuntan contra el sindicato de estatales que se instaló en el playón municipal. En diálogo con LPO, sugirieron que la presencia de los gremialistas es una forma de asegurarse que la mayor cantidad de gente no vaya a sus puestos de trabajo.

En ese sentido, marcaron la "cuestión política" en torno al paro. Remarcaron que los funcionarios no adhirieron pero les dieron "libertad" de elección a los trabajadores. "os gremios para que haya adhesión importante al paro decidieron poner gente en puntos de ingreso a los municipios para amedrentar gente que quiera trabajar, es una práctica lamentable que aún se desarrolla", denunciaron.

En concordancia con otros municipios macristas, desde San Miguel, reportaron que la Municipalidad función "normalmente". "El 95 por ciento de los empleados están trabajando. Sólo hay casos puntuales, de algunos que viven lejos y no pudieron venir por cuestiones de fuerza mayor, pero son casos minoritarios". En San Miguel también aseguran que están abiertos todos los centros de salud y hospitales, que funcionan con "total normalidad". 

En tanto, en municipios de signo massista como San Fernando y Tigre, se dio "libertad de acción" a los empleados. Según reportaron a LPO, en Tigre la Municipalidad trabajaba con "normalidad", salvo algunos empleados que no fueron a quienes se les respetará el derecho a huelga, mientras que desde San Fernando afirmaron que muchos empleados que no pudieron llegar, trabajaron "home office" pero brindaron tareas.