Por segunda vez en 3 días, la plaza de mayo se cubrió de gente para criticar a Mauricio Macri, esta vez en la conmemoración por el 41 aniversario del golpe de Estado, que el presidente prefirió no recordar con actos oficiales sino con un post en su cuenta de facebook. 

La concentración frente a Casa Rosada, donde se montó un escenario, tuvo dos etapas: a las 15 fueron las organizaciones de Derechos Humanos como Abuelas de Plaza de Mayo, Abuelas e Hijos; y sobre las 17 se retiraron para darle el turno a otras que llegaron acompañadas por partidos de izquierda.

El presidente fue el blanco elegido en ambos actos, que concentraron multitudes similares a la que llevó la marcha de docente el miércoles.

En el primer turno, representantes de Abuelas e Hijos denunciaron "los enormes retrocesos en materia de derechos humanos" desde la asunción de Macri, ante un público con agrupaciones kirchneristas como La Cámpora, que aprovechaban los tramos de silencio para ensayar consignas como "Vamos a volver" o "Macri, basura, vos sos la dictadura".

El documento final, leído en tramos por referentes de todas las agrupaciones, calificó al Gobierno de Macri como "antipopular" y lo compararon su gestión económica con la última del proceso militar.

"El modelo económico de este gobierno tiene los mismos objetivos desde Martínez de Hoz (ministro de Economía de la dictadura militar), menos derechos de los trabajadores, destrucción de la industria nacional, aumento indiscriminado de la deuda externa y alineamiento con Estados Unidos y el FMI", leyeron en un documento.

Estela de Carlotto se ubicó en el escenario mientras que Hebe de Bonafini llegó en una combi junto a Aníbal Fernández y Roberto Baradel y recién al final del día habló frente al Cabildo para reivindicarse kirchnerista. "¿Qué es eso de ser democráticos para ser buenitos? Me cago en los buenos. No soy buena".  

"Las Madres nunca, jamás vamos a dejar los ideales al proyecto nacional y popular que Cristina y Néstor (Kirchner) dejaron en nuestras manos. Es un proyecto nacional y popular que tenemos que llevar adelante, y vamos a volver", prometió.

Pero muchos kirchneristas habían hecho silencio cuando una referente de Hijos celebró la detención de César Milani, ex jefe del ejército durante el último tramo de la presidencia de Cristina Kirchner.

El cierre lo hizo Taty Almeyda, de Madres Línea Fundadora, con ataques bien directo a Macri, como pedir la liberación de "presos políticos", en referencia a Milagro Sala o repudiar las denuncias a Baradel; o que cesen los intentos por remover a la Procuradora General Alejandra Gils Carbó.

Además, exigieron al Gobierno involucrarse en la investigación por la desaparición de Julio López, testigo en el juicio contra el ex represor Miguel Etchecolatz de 2006 y sin rastros desde ese año.

El documento también repudió al secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj, por insistir esta mañana en que el libro de la Conadep "Nunca Más" habla de 8.500 desaparecidos y no de "30 mil", como mencionan los organismos de derechos humanos.

"Mauricio Macri retrocede y se niega a hablar de la cantidad de desaparecidos y tiene funcionarios que ejercen el negacionismo. No vamos a permitir impunidad, el único lugar para un genocida es la cárcel común no lo son su casa o cárceles de lujo como Campo de Mayo", señalaron en el documento.

"Seguimos reclamando la urgente apertura y desclasificación de todos los archivos para saber el nombre de los cupables y qué hicieron con los cuerpos de las víctimas, agregaron.

La izquierda arribó a la plaza de mayo sobre las 17  con más consignas contra el Gobierno, como el cese de la investigación sobre los responsables civiles de la dictadura, iniciada en la última etapa del Gobierno de Cristina, con una bicameral y una oficina en el Banco Central, ya desmanteladas.