La Iglesia comunicó su "decisión obligada" de trasladar a Merlo al padre Eduardo Farrell -quien realizaba un intenso trabajo social desde la parroquia Sagrado Corazón de Cuartel V (Moreno)- porque no podía "garantizar su seguridad" a raíz de las intimidaciones que sufría, presuntamente realizadas por narcos.

Desde el Ministerio de Seguridad bonaerense confirmaron a LPO que Farrell hizo la denuncia que, como chequeó este sitio, data del 7 de marzo. Sin embargo, también aseguraron que no recibieron ningún pedido de custodia por parte del sacerdote.

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Por eso, mientras que desde la Iglesia manifestaron una "gran preocupación y profundo dolor" de ver que "la violencia se va naturalizando en nuestras comunidades", desde la Provincia le bajaron el tono al asunto y relativizaron las amenazas.

Incluso, fuentes bonaerenses de Cambiemos que buscaron preservarse en off, quisieron ligar al párroco con la Tupac Amaru de Milagro Sala y consideraron que el cura hace "todo este lío" por otros motivos, entre los que adujeron "enojo porque le sacaron unos planes y becas". 

También contaron que Farrell tiene un centro cultural "La Chicharra" en Moreno. El cura, de reconocida labor social en su localidad, está ligado al Movimiento Misioneros de Francisco, un movimiento católico creado por el dirigente del Movimiento Evita, Emilio Pérsico.

"Dejate de joder que te vamos a hacer boleta", es una de las amenazas que, entre otras intimidaciones, Farrell recibió por parte de un hombre que viajaba en una moto gris, como quedó registrado en la denuncia policial.

Según explicaron fuentes locales a LPO, las intimidaciones ya venían desde hace meses, pero fueron in crescendo a partir de diciembre, cuando brindó una misa en homenaje al militante social César Méndez, asesinado en ese municipio. El 22 de diciembre hubo una marcha en reclamo de Justicia, en la que el cura fue el único orador.

A raíz de esas intimidaciones. la diócesis Merlo-Moreno informó que no encontró otra solución más que el traslado del párroco, que trabajaba en una zona marginal, para "preservar su integridad física".

"Debemos tomar conciencia del avance en nuestros barrios del comercio de drogas ilícitas, con todo lo que ello significa: peligroso deterioro de la salud de nuestros jóvenes y, muchas veces, brutales enfrentamientos por el control del territorio", aseveró el obispo de Merlo-Moreno, monseñor Fernando Carlos Maletti.

Los sacerdotes de la Diócesis de Merlo-Moreno

Pastoral de Comunicación de la Diócesis de Merlo-Moreno

En ese sentido, el obispo afirmó que hay "claras señales de que su accionar y su prédica significaban una molestia para los sectores que se desenvuelven al margen de la ley".

"En los últimos meses y, especialmente en los últimos días, las advertencias con significado de amenaza, se han reiterado puntualmente en la zona de Cuartel V y en la persona del Padre Eduardo Farrell", relató.

En tanto, la Comisión Nacional Justicia y Paz (CNJyP) se unió "al clamor de la diócesis de Merlo-Moreno" que traslado de destino pastoral a Farrell para protegerlo, y expresó solidaridad "con las personas que sufren amenazas por su valiente oposición al mal".

El organismo dependiente de la Conferencia Episcopal Argentina, que preside Emilio Inzaurraga e integran mayormente laicos, sostuvo que "también en otros lugares del país se viven situaciones similares aunque muchas no se den a conocer por miedo a las consecuencias de la denuncia".