Cristina Kirchner buscó frenar la tensión con el peronismo por la presión de su círculo duro para que el 7 de marzo marchen a Comodoro Py y no junto a la CGT, y finalmente le pidió a sus seguidores que acompañen la manifestación de los trabajadores contra el Gobierno de Macri.

"El 7 de marzo tienen que marchar todos y todas, pero junto a los trabajadores", escribió la ex Presidenta a primera hora de la mañana, acaso para evitar que la cumbre del peronismo bonaerense en San Vicente termine mal.

Es que, como reveló LPO, cuando todo parecía encaminado para que el PJ selle la unidad la semana pasada en Santa Teresita, el propio Máximo Kirchner exigió que la declaración final incluyera un convocatoria a marchar a los tribunales de Comodoro Py el 7 de marzo cuando debe declarar Cristina. Esto hizo estallar por los aires la cumbre y el titular del partido, Fernando Espinoza, la canceló porque pronosticaban lluvia. 

Este miércoles Espinoza logró cerrar una nueva reunión con una promesa hacia los sectores que miran con recelo a Cristina. "Ya volamos del documento final lo de la movilización a Comodoro Py que había pedido La Cámpora", decían desde el entorno del matancero. La idea es firmar un documento acotado a la unidad en defensa del trabajo, en sintonía con lo que propone la CGT.

Cristina se sumó a este discurso y expresó su respaldo al reclamo. "La gente está muy mal. No llega a fin de mes. Siguen despidiendo obreros y cerrando fábricas. Las facturas que llegan de luz, de agua y de gas se están tornando impagables para muchos compatriotas. Cocheras, peajes, expensas, colegios, prepagas, transporte público, precios imposibles en el súper azotan los bolsillos de los argentinos", escribió.

"Poner la energía y las ganas en Comodoro Py, por una convocatoria más de Bonadío, no vale la pena. Es muy grave lo que le está pasando al Pueblo argentino", agregó Cristina, que le recomendó a los suyos "no caer en la trampa". "El 7, yo lo veo a Bonadío, pero por favor... Ustedes hagan que el Gobierno vea al Pueblo. Marchen junto a los trabajadores y trabajadoras", completó.

Las palabras de Cristina ponen paños fríos a esta insólita polémica que habían armado sus ultras con la CGT y el peronismo. Además del pedido de Máximo, por las redes sociales Hebe de Bonafini y Luis D'Elía lanzaron fuertes advertencias contra la central por no sumarse al apoyo a la ex presidenta.

En tanto, la CGT esta semana había cerrado un apoyo institucional del PJ nacional y también de los intendentes del Grupo Esmeralda, que como reveló LPO estaban divididos respecto a concurrir o no a San Vicente y siguen temerosos de que La Cámpora termine monopolizando los encuentros del partido.