El kirchnerismo sufrió este viernes un durÃsimo golpe simbólico con la detención del ex jefe del Ejército durante el gobierno de Cristina Kirchner, el teniente general César Milani, que investiga los secuestros de Pedro Adán Olivera, de su hijo Ramón Alfredo Olivera y la estudiante Verónica Matta, ocurridos en La Rioja durante la dictadura en marzo de 1977.
Milani se presentó esta mañana a declarar en la causa que lleva adelante el juez federal, Daniel Herrera Piedrabuena, quien investiga los secuestros de Olivera y de su hijo, por los cuales se lo acusa a Milani de estar presuntamente involucrado cuando era un joven oficial que estaba destinado en el Batallón 141 de Ingenieros de La Rioja.
En marzo de 1977, Olivera fue secuestrado en su casa y permaneció desaparecido durante dos dÃas, en los que dijo haber sido torturado. Luego lo liberaron en la puerta de su casa y se llevaron a su hijo, Ramón Olivera, quien corrió la misma suerte durante diez dÃas.
La decisión del arresto fue dispuesta por el juez federal Daniel Herrera Piedrabuena. La noticia conmocionó al kirchnerismo que se sumió en un profundo silencio, salvo el periodista Horacio Verbistky, que a través del Cels, festejó la decisión y recordó que el organismo que preside se opuso en su momento a que ocupara la la jefatura del Ejército.
Milani fue una pieza clave en el aparato de inteligencia que armó la ex presidenta y recibió el respaldo de la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, pese a que acumulaba denuncias de violación de los derechos humanos.
Poco antes de ser detenido, Milani emitió un comunicado en el que afirmó que "jamas he privado a nadie de la libertad, jamas he encubierto ninguna conducta que supiese delictiva y, mucho menos produje la tortura o muerte de nadie".
En su descargo, Milani hizo referencia a cada uno de los hechos e intentó despegarse de las acusaciones; solicitó medidas de prueba es insistió con la nulidad del su llamado a indagatoria.
Sobre la detención ilegal Pedro Olivera, ocurrida dÃa 12 de marzo de 1977, sostuvo: "Ha quedado demostrado en el expediente que yo no me encontraba en La Rioja a raÃz de una actividad en comisión entre los dÃas 10 y 15 de marzo de 1977, permitiendo sostener la imposibilidad material de encontrarme `comandando´ un allanamiento y detención".
Los hechos denunciados
El primer hecho imputado por el juez Piedrabuena, según la resolución del magistrado, ocurre "el 12 de marzo de 1977, cuando un grupo de tareas fuertemente armado y comandados por el entonces subteniente Milani, acompañado por dos policÃas de la provincia, uno de apellido Nievas y el otro Ruiz, ingresó a la vivienda donde residÃa la familia Olivera, le comunicó a la familia que, Pedro el jefe de la familia, serÃa trasladado a una dependencia de seguridad para verificar sus antecedentes".
"Posteriormente lo subieron en la parte trasera de una camioneta color verde del Ejército que estaba estacionada al frente de la casa, luego de ello, fue trasladado al entonces Instituto de Rehabilitación Social (IRS)en donde fue vÃctima de torturas que consistieron en golpizas estando encapuchado lo que le produjo la parálisis de medio cuerpo", agrega el juez.
"En relación a Ramón Alfredo Olivera. mientras este se encontraba trabajando en las oficinas de la Municipalidad de la Capital, se presentaron dos suboficiales de Ejército, lo detuvieron y lo introdujeron en un móvil de la PolicÃa en el que se encontraban América Castro y el Sargento Santacroche siendo conducido al IRS, en donde sufrió amenazas, torturas y tormentos, quedando alojado en un calabozo", agrega.
Y señala que "ya en en el calabozo, Ramón Olivera fue vendado en los ojos, le ataron las manos por la espalda, fue subido a un vehÃculo en donde le insinuaban que iban a matarlo, lo bajaron y comenzaron los castigos con una goma ancha y pesada para interrogándolo si conocÃa a otras personas, pudiendo escuchar el intenso castigo que le propinaban a otro detenido".
"Posteriormente es llevado a un galpón en donde lo interrogaron aplicándole golpes en el estómago y genitales, patadas y revés de mano, para luego ser llevado de nuevo a su celda y años más tarde, quedó en libertad a disposición del juez federal Roberto Catalán" quien también está involucrado en el expediente de esta investigación", sigue la resolución.
A Ramón se lo acusó de pertenecer a la organización polÃtico-militar Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), y Milani habrÃa participado en el traslado del joven al juzgado de Catalán. Olivera estuvo detenido por más de cuatro años durante la última dictadura en la Unidad 9 de La Plata
Con relación a los hechos que vinculan a Milani con Verónica Matta, la misma declaró ante la justicia federal por su secuestro el 16 de julio de 1976 y "también vinculó a Milani con su detención ilegal" por ser delegada en el Colegio Nacional JoaquÃn V. González de La Rioja donde estudiaba y además donde conoció a Alberto Ledo, conscripto riojano desaparecido en Tucumán, caso en el que también está implicado Milani.
"HabÃa una figura que contrastaba con el resto de los presentes, era un joven vestido de militar, muy apuesto, carilindo y que llevaba la voz cantante y le decÃa a mi padre que no se preocupe por nada, a lo que mi padre preguntó si a dónde me llevaban a lo que respondió que ‘no le podemos decir, doctor', le decÃa este militar que para mà era Milani", recordó Matta en su declaración testimonial.
"Posteriormente, me trasladan en un auto de color oscuro al Instituto de Rehabilitación Social (IRS) donde me sacaron todo lo que traÃa y fui puesta en un calabozo muy pequeño con una ventana y después me revisó un médico y me hizo una especie de certificado".
"Estuve detenida en ese lugar varios dÃas, para luego personal del IRS me hizo saber que mi hermana también estaba detenida ahÃ".
En su declaración testimonial que se refleja en la resolución por la que se detiene a Milani, Matta señaló: "Me hicieron declarar bajo tortura, no recordando exactamente cuando comenzaron este tipo de procedimientos".
Por todo ello, el juez ordenó la inmediata detención de César Milani, disponiendo su inmediato traslado al Servicio Peniteciario Provincial.
Por otra parte, Milani está complicado judicialmente en Tucumán en la causa que investiga la desaparición del soldado Alberto Ledo, ocurrida en 1976 en el marco del llamado Operativo Independencia.
