Aceptando que el nuevo gobierno estadounidense implicará un cambio en las relaciones comerciales con México, el presidente del país azteca, Enrique Peña Nieto, reafirmó que la estrategia seguirá siendo la de mercados abiertos y apostará a fortalecer relaciones con otros mercados, como Canadá, el otro integrante del NAFTA con el que este domingo por la noche habló Peña para coordinar una estrategia frente a la embestida de Trump.
Esta semana el canciller Luis Videgaray -estratega de este gobierno priista- y el ministro de Economía, Ildefonso Guajardo protagonizarán una serie de encuentros con los asesores de Donald Trump que operan en la Casa Blanca. El asesor de estrategia Steve Bannon, el asesor senior y yerno del presidente Jared Kushner y el asesor de seguridad Michael Flynn.
En esta primera ronda no participará Peter Navarro, asesor de comercio, de corte proteccionista porque en este aspecto, según dicen en el Gobierno, Navarro prefiere que ya este confirmado Wilbur Ross como secretario de comercio.
Flynn es el asesor con quien más contacto tuvo Videgaray en los últimos días porque fue con quien el canciller negoció los tiempos de la extradición de Joaquín "el Chapo" Guzmán Loera. Bannon es el más duro de los primeros interlocutores porque se ha manifestado abiertamente anti México y además no le importan las formas.
Peña Nieto aseguró que “México debe y puede incrementar sus relaciones” y desplegó una serie de planes que tiene para estrechar sus relaciones comerciales con otros mercados, de manera que el comercio exterior no quede concentrado solo en Estados Unidos, como lo había sido hasta ahora.
“Seguiremos fortaleciendo nuestra relación con otras regiones del mundo como América Latina y el caribe, con mayor sentido estratégico y trabajaremos para que se transforme en mayor comercio y más empleos”. Como muestra de esto, explicó que esta semana asistirá la cumbre de CELAC.
En cuanto al segundo punto, aseguró que la manera en que enfrentarán al nuevo gobierno no será “ni de confrontación ni sumisión, será de diálogo”, prometiendo que defenderá los intereses nacionales y señalando que se seguirán cinco principios. Estos son: soberanía nacional, respeto al estado de derecho, una negociación ganar-ganar, la integración de la región de Norteamérica y que esta sea integral.
Otro de los objetivos está relacionado con las remesas. En ese sentido dijo que el gobierno mexicano debe asegurar el libre flujo de remesas evitando que se dificulte o encarezca su envío. Trump ha dicho que por este medio podría hacer pagar a México el muro que planea construir en su frontera sur. Las remesas es uno de los asuntos primordiales de la gestión de Carlos Sada ahora como subsecretario para Norteamérica. Esta semana el ex embajador tendrá un encuentro con José Antonio Meade por este flujo que representa el tercer principal ingreso.
Peña Nieto dijo que buscará preservar el libre comercio entre los tres países que integran el TLCAN y que estos intercambios estén exentos de cualquier arancel o cuota. Entre otros puntos también mandó un mensaje al mercado financiero y habló por trabajar por proteger las inversiones, tanto mexicanas como extranjeras. “Crearemos instrumentos para dar certidumbre de inversión. Defenderemos las inversiones nacionales y de cualquier otro país”
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