Golpeados por la derrota con Ganancias, Mauricio Macri y Marcos Peña salieron a destrozar a Sergio Massa y los gobernadores peronistas, a quienes paradójicamente necesitan para tratar de frenar el proyecto en el Senado y para sacar otras leyes que impulsa el propio Gobierno.

En medio del acto de inauguración de las obras de refacción del aeropuerto de Mendoza, el Presidente lanzó una fuerte crítica contra los diputados de la oposición que el martes votaron su propio proyecto de Ganancias y rechazaron el del Ejecutivo. "La irresponsabilidad que vimos ayer no es el camino", los retó Macri.

Macri subrayó que Massa, Kicillof, Bossió, Solá y Camaño tuvieron cargos en gobiernos del PJ, confirmando el anticipo de LPO: El Gobierno decidió ayer empezar la campaña para el 2017, poniendo el eje en el antiperonismo.

Luego, en tono de broma pero visiblemente molesto, le dedicó una chicana a Massa, hasta ayer su principal aliado legislativo. "Mientras hacía gimnasia escuché en la radio que alguien dijo que tuvo una pesadilla. El jefe de Gabinete de Cristina, Sergio Massa, el ministro de Economía, Áxel Kicillof, el responsable de la Anses, Diego Bossio, el ex gobernador Felipe Solá, la ex ministra de Trabajo, Graciela Camaño… Todos decidiendo sobre el Impuesto a las Ganancias sobre el cual no se ocuparon por más de una década", lanzó.

Como adelantó LPO, Macri decidió aprovechar la derrota para lanzar una fuerte campaña contra el peronismo, acusándolo de desestabilizar al Gobierno. Esa es la línea que bajaron anoche en la Rosada, en lo que no es más que el inicio de la campaña 2017.

Se trata claro de un recurso político, ya que en Cambiemos hay varios funcionarios que ocuparon cargos en gobiernos del peronismo, como Jorge Triaca, Patricia Bullrich, Cristian Ritondo, Lino Barañao y hasta el propio Emilio Monzó, que este domingo comentó en una entrevista: "Yo le avise a Macri que era peronista".

"Como si los argentinos no tuviésemos memoria, no recordáramos que hemos batallado un año durísimo, que a mucha gente le costó porque nos dejaron un país quebrado, con deudas por todos lados", recriminó Macri, acaso sin percatarse que a su lado estaba el ex canciller kirchnerista Rafael Bielsa, directivo de Aeropuertos Argentina 2000.

Pero el más sacado no fue Macri sino Marcos Peña. El jefe de Gabinete no sólo repitió que los que votaron a favor del proyecto son "irresponsables" sino que además atacó personalmente a Massa y dijo que es el político menos "confiable" de la Argentina.

"No sé si me sorprende lo que sucedió en el Congreso. Está claro que Sergio Massa es la persona menos confiable del sistema político argentino. Haber hecho un proyecto mentiroso e irresponsable habla más de ellos que de nosotros", afirmó en una entrevista con Infobae.

Luego, acusó al líder del Frente Renovador de incumplir su palabra. "Digo esto de Massa porque él se había comprometido con el Presidente y con nosotros a no perjudicar el costo fiscal", señaló Peña.

Marcos Peña, que ante el viaje a China de Frigerio, se involucro directamente en el esfuerzo por partir el bloque de Sergio Massa, fue el más duro: "Massa es la persona menos confiable del sistema político argentino", afirmó.

El jefe de Gabinete también apuntó contra los gobernadores peronistas, a los que hasta última hora intentó seducir para que cambien el voto de sus diputados. "También me sorprenden muchos gobernadores, que están preocupados por que no llegan a fin de mes y ayer acompañaron una votación que genera un enorme perjuicio al fisco", aseguró Peña.

Lo curioso de la declaración contra los gobernadores es que son los que tienen la llave para frenar el proyecto en el Senado y, por ende, la única esperanza de la Rosada para evitar el veto a la reforma de Ganancias, lo que implicaría un costo político importante. Pero Peña parece haberse resignado a que tampoco podrán torcer voluntades en la Cámara alta.

Del mismo modo, el Gobierno necesita de Massa para sacar algunas leyes antes de fin de año, como la reforma de las ART que se tratará la semana próxima. Según supo LPO, el tigrense hizo algún gesto en las últimas horas a uno de los jefes legislativos de Cambiemos para tratar de poner paños fríos y trabajar en acuerdos para las próximas leyes. Pero la respuesta fue más que clara.

Peña no dejó ningún posible aliado sin golpear. Hasta la líder del GEN pagó la cuenta, pese a que estuvo ausente en la votación de Ganancias. "Me llama la atención ver a Margarita Stolbizer votando junto a Julio De Vido", la chicaneó.