Cristina Kirchner finalmente asistió a los tribunales federales de Comodoro Py a cumplir con el trámite de registrar sus huellas digitales y someterse a un estudio socioambiental que le había ordenado el juez Claudio Bonadio en el marco de la causa dólar futuro, y que la ex Presidenta había tratado de evitar.

La ex mandataria arribó a la sede judicial del barrio porteño de Retiro a las 7:50 de la mañana y se fue unos cuarenta minutos después, en medio de un fuerte operativo policial, aunque sin la presencia de la militancia, como pidió Cristina. 

Aunque esta vez eligió el perfil bajo -no formuló declaraciones- y fue a los tribunales sin sus fans -que en la anterior visita terminaron chocando con la polícía-, la ex presidenta después se despachó por Twitter y criticó al juez por llegar tarde a su trabajo.

"En las oficinas del juzgado, dos o tres empleados. Que raro, siempre estaba lleno de gente. ¿Será por la hora?", ironizó. "La Secretaria María Muntaner no está. Nos dicen que está estacionando el auto. Ajá... Pregunto por Su Señoría. Nos dicen que todavía no llegó. Ajá. A todo esto, habían pasado las 8.00 hs...", continuó.

Después de contar cómo fue el trámite, Cristina encontró algo para elogiarle a la Justicia. "Lo más sensato y moderno de todo: las toallitas húmedas para limpiarte los dedos entintados. Increíbles, como estos tipos...", escribió. 

Para el final, le dedicó el mensaje a Bonadio, a quien no se cruzó. "Cuando me fuí Bonadío todavía no había llegado. Y sabés qué? Además no paga ganancias...", chicaneó.

De esta forma, Cristina cumplió con las medidas establecidas por Bonadio en una audiencia que estaba prevista para la semana pasada, pero que la ex presidenta intentó realizar en Río Gallegos, algo que el juez no había autorizado.

Esto derivó en una advertencia de Bonadio a Cristina para que asista a Comodoro Py a más tardar este martes antes de las 13 horas, o de lo contrario la llevaría con la fuerza pública. Ante esto, la defensa de la ex presidenta lo denunció por abuso de autoridad y advirtió que de cumplir con su amenaza el magistrado "habrá de consumar una privación ilegal calificada" de la libertad. 

En el medio de las jugadas judiciales, Cristina hizo un reality show de su visita a los tribunales de Río Gallegos para intentar cumplir con el trámite allí. La ex mandataria difundió luego un video de 15 minutos en las redes sociales donde denunció que es objeto de "una formidable persecución política, por momentos ridícula".