Sergio Massa y Margarita Stolbizer frenaron la ley para atraer inversiones que promueve Mauricio Macri, poco antes que se votara en el recinto con al menos 130 cambios que habían negociado durante la tarde referentes de Cambiemos, el Frente Renovador y el bloque Justicialista, como anticipó LPO que iba a suceder.

Cuando se aproximaba la votación, el metalúrgico Abel Furlán, del FpV-PJ, pidió votar la vuelta del proyecto a Comisión y el resultado fue inesperado: 107 a favor y 105 en contra.

Podría haber sido empate y triunfo de Cambiemos si el radical Hubo Marcucci no se equivocaba y votaba en contra, error que intentó remendar cuando ya era tarde, pero la mayor sorpresa fue que el Frente Renovador y varios diputados del Bloque Justicialista, optaron por regresar la iniciativa a comisión aun después de trabajar horas con el oficialismo para devolver el proyecto al Senado hoy mismo. 

Para que vuelva a comisión fue clave la abstención de los nueve diputados del Frente Progresista, liderados por Stolbizer. Ya lo había rechazado durante el debate en Comisión de la semana pasada, cuando el oficialismo ni siquiera pudo asegurar el apoyo pleno de su bloque y aun así firmó dictamen y anticipó que iría a todo o nada en el recinto.

La presión de la Casa Rosada por jugarse a ciegas en los votaciones no parece darles resultado: en la última semana se cayeron 5 proyectos antes de tratarse y aún negocia cómo hacer para tratar el presupuesto el miércoles, como pauta la agenda escrita por Emilio Monzó.

Los diputados massistas Raúl Pérez y Graciela Camaño.

DyN

La ley para la participación pública privada (PPP) es un anhelo de Macri para atraer inversiones, pero cuenta con algunas concesiones polémicas a los capitales que arriben al país como la posibilidad de litigar en el exterior o hasta ceder su participación en las inversiones. 

El diputado del PRO Daniel Lipovetzky llevaba negociada decenas de cambios tales como una bicameral que supervise a las empresas, la incorporación de Pymes como proveedores y hasta un límite de las PPP, calculado en el 7% del PBI.

Pero mientras escribía y tachaba sobre la banca de Bossio y la de Lavagna, Massa llegó al recinto decidido a romper todo, aún molesto por el fallido debate de la ley de ministerio público, que su bloque apoyó pero Macri congeló porque Elisa Carrió, recién este lunes, dijo que no estaba de acuerdo.

Algunos diputados de Cambiemos agradecieron a Kicillof que apoyara el regreso a Comisión, si se rechazaba el proyecto en el recinto podían pasar hasta dos años hasta que volviera a tratarse.

“¿Vamos a votar 130 cambios en el recinto de una ley que puede definir los próximos 30 años de inversiones?”, lo hizo reflexionar Stolbizer a través de un chat y el tigrense no dudó y mandó a sus dirigidos a devolver el proyecto a Comisión, para sorpresa de Emilio Monzó.

Kicillof festejaba en su banca, pero en Cambiemos algunos le agradecían: si se rechazaba el proyecto, que en ese momento ya ni se sabía bien qué era, no iba a ser posible debatirlo en el recinto al menos por dos años.

Ahora Massa y Bossio creen que podrán revisarlo en Comisión y devolverlo al Senado en 15 días, donde seguramente lo tratarán junto al presupuesto.

En el oficialismo la bronca era doble, porque al inicio de la sesión ayudaron a aprobar un proyecto que le otorga a la Federación Argentina de Colegios de Abogados la matrícula para litigar en el fuero federal, promovido por el diputado del Frente Renovador Raúl Pérez, en sintonía con el también platense Carlos Andreucci, presidente de la FACA. No hubo devolución de favores.