La semana que pasó y después de algunas postergaciones por las diferencias internas en el bloque oficialista, la Cámara de Diputados votó a favor de que la provincia adhiera al blanqueo impulsado por el gobierno nacional.

Antonio Bonfatti, presidente de la Cámara, no estaba convencido de acompañar la iniciativa. "Siempre votamos en contra de todos los blanqueos", recordó en diálogo con LPO, Eduardo Di Pollina, espada del socialismo en la Legislatura.

"De hecho, nuestros diputados - Hermes Binner y Alicia Ciciliani - votaron en contra cuando se trató el proyecto nacional", agregó Di Pollina.

Ahora, el escenario político obligó al espacio progresista a evaluar prioridades. La recomposición de la relación con el gobierno macrista, después de diez meses de chisporroteos, impuso la necesidad de alinear a Santa Fe con las provincias que acompañan el blanqueo, una apuesta fundamental para el equipo económico nacional.

De hecho, la medida era uno de los puntos solicitados por Macri en el "acuerdo de paz" con el gobernador santafesino que permitió destrabar la ayuda en materia de seguridad. Horas después de aprobado el blanqueo, desembarcaron Marcos Peña y Guillermo Dietrich para anunciar obras por 21 mil millones de pesos en la provincia, sobre todo en infraestructura portuaria.

Peña, Lifschitz, Dietrich y Anita Martínez al anunciar las inversiones en los puertos de Rosario.

Presidencia

Sumar a Santa Fe al blanqueo es clave para el Gobierno porque la iniciativa no está teniendo el éxito esperado, al punto que el Gobierno tuvo que extender el plazo de cierre para blanquear tenencias en efectivo.

Sin embargo, al ejecutivo no le fue sencillo convencer a los legisladores del socialismo que era esquivo, en principio, a acompañar la medida: "Nos tragamos el sapo y acompañamos al gobernador porque entendimos la situación", explicó un dirigente a LPO al tanto de las negociaciones.

Las condiciones de blanqueo en Santa Fe¡

Desde el gobierno de Mauricio Macri veían con preocupación que una provincia como Santa Fe, donde están radicadas las principales cerealeras y puertos, no hubiera adherido aún a la ley de blanqueos.

"Necesitamos que la provincia acompañe para garantizar el éxito del blanqueo", afirmaban en la Legislatura los diputados que impulsaban la medida, entre ellos el radical Julián Galdeano.

Sin embargo, la discusión política entre los distintos bloques derivó en algunos cambios del texto original e impuso condiciones para aquellos que quieran ingresar al régimen de sinceramiento fiscal.

En principio, quienes repatrien más de 300 mil pesos deberán pagar el uno por ciento de impuesto provincial que será coparticipado a comunas y municipios mientras que lo que le corresponda a la provincia se afectará al Fondo de Infraestructura Vial.

Aunque, estarán exentos de pagar el tributo aquellos que hagan inversiones en la provincia por más del 60 por ciento del patrimonio blanqueado.

Así mismo, quienes tengan pleitos judiciales o algún legajo en la Administración Provincial de Impuestos -API- por evasión no podrá beneficiarse la medida.

Estos condicionantes fueron resistidos por los legisladores alineados al macrismo que trataron de evitar que los mismos lleguen al texto definitivo de la norma. Sin embargo, la discusión política obligó a incorporarlos para que el bloque mayoritario, el socialista, acompañe.

Finalmente, la ley se terminó sancionando este juevves con 28 votos a favor, 11 en contra y una abstención. Entre los votos negativos se encontraron los el bloque Participación e igualdad del ex senador Rubén Giustiniani que, junto a su par, Silvia Augsburger, marcan, cada vez, diferencias mas profundas con el resto del socialismo.