El jefe de Gabinete, Marcos Peña, advirtió que la ex presidenta Cristina Kirchner "tiene más importancia de la que se le da" en la provincia de Buenos Aires, a la vez remarcó que "el kirchnerismo tiene una fuerza electoral superior a la que muchos suponen".

"Cristina Kirchner tiene más importancia de la que se le da. Hay una cantidad de gente que cree que las cosas están mal con el gobierno y que les gustaría cambiar para volver al kirchnerismo", sentenció el funcionario, al ser consultado sobre si la ex mandataria es más importante que el peronismo en la Provincia. Para el jefe de Gabinete, "hay un 20-25 por ciento de bonaerenses que hoy le son fieles conceptual y políticamente a Cristina y que van a votar por ella o por quien disponga, independiente de si está presa o está libre", por lo que concluyó que "la demanda ordena la oferta, no la oferta a la demanda".

Con vistas a los comicios del año que viene, Peña aseguró que no sabe si el ex ministro de Transporte Florencio Randazzo va a ser candidato, mientras que opinó que el diputado Sergio Massa "tiene posibilidades" de llegar a la Presidencia.

En una entrevista que publicó hoy el semanario Perfil, Peña destacó que "el kirchnerismo tiene una fuerza electoral superior a la que muchos suponen", pero consideró que "hay un porcentaje cada vez más reducido de gente vota por una identidad partidaria, y más cuando esa identidad partidaria va a estar fragmentada en varios pedazos".

En cuanto a las chances del Gobierno de ganar las elecciones parlamentarias, remató: "Si no somos capaces de mostrar que este proceso te mejora la vida, entonces nos dirán: 'Muchas gracias, lo intentaron, pero yo vuelvo a un esquema anterior que no me resolvía lo político, pero algo me tiraba'".

Consultado sobre si la diputada Margarita Stolbizer podría ser candidata por el oficialismo, respondió que la jefa del GEN "no ha mostrado ninguna voluntad de ser parte de Cambiemos" porque "tiene su propio proyecto político y nos parecería casi faltarle el respeto plantear eso", pero remarcó que si ella quisiera, lo analizarían.

Sobre si Cambiemos busca armonizar lo mejor del menemismo y el kirchnerismo, respondió que "sí" y agregó que "en un 80 por ciento tuvieron la misma base electoral: el menemismo y el kirchnerismo fueron prácticamente idénticos, en términos de dirigencia y en términos de base electoral".

Peña también sostuvo que le valora "mucho" al kirchnerismo que "pese a toda su retórica, nunca pasó a la violencia política, porque el mayor valor del período 1983-2015 fue durar democráticamente dentro de las reglas del juego, que permitió parir justamente una generación que siempre pudo votar".

"El kirchnerismo terminó de profundizar ese fenómenos de confrontación con algo que no nos representaba pero que nos ponía frente a un abismo de no retorno. Muchas de las discusiones que estamos teniendo hoy son las de la crisis de 2001, de la que no salimos hasta la elección de diciembre", analizó.

Sin embargo, cuestionó que "el kirchnerismo tuvo intuiciones contemporáneas resueltas desde una visión reaccionaria y conservadora", por lo que concluyó que "profundamente conservador es el kirchnerismo".

"Fue transformador en lo discursivo pero, en la realidad, hoy vivimos en una sociedad más cerrada, más atrasada, más injusta y más desigual que la que teníamos antes, por más que algunos indicadores se apropiaron positivamente del crecimiento. Mentalmente, fueron muy reaccionarios", apuntó.

Al respecto, amplió que "la ejecución, con los problemas de corrupción y la incompetencia, generó una brecha enorme entre lo que decían y lo que hacían".