El proyecto de ley de Presupuesto 2017 presentado por el Ministerio de Hacienda y Finanzas a cargo de Alfonso Prat Gay fue bienvenido y halagado en primera instancia por estar elaborado en base a números de un Indec creíble.

Sin embargo, los cuestionamientos no tardaron en llegar. “Hay algunos temas sobre los que faltan precisiones”, respondió Rafael Flores, presidente de ASAP ante la consulta de LPO sobre la planificación financiera para cubrir el déficit fiscal. Es que aun sin saber con exactitud los recursos que provendrán del blanqueo tampoco hay margen para dar detalles. Por eso mismo, como aun no se ha tratado la modificación del impuesto a las Ganancias, el proyecto de ley no la contempla.

El otro cuestionamiento viene porque el Congreso está discutiendo el presupuesto apoyándose en tres supuestos cruciales (inflación anual del 17%, dólar a $18 a fines de diciembre de 2017 y crecimiento económico del 3,5%) que señalan como inconsistentes. En especial, la inflación.

Ayer el presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, anticipó al presentar el programa de Metas de Inflación que el año que viene la inflación estará debajo del 17% y encima del 12%. Puede pensarse que ni Prat Gay le tuvo mucha fe al fijar como inflación para el presupuesto la cota máxima y no un promedio, o bien que prefirieron ser más moderados conscientes de que para 2016 la inflación cerrará cercana al 45% anual.

Por ejemplo, para Fabián Medina del Frente Renovador, la inflación anual del 17% “Sería imposible con un promedio del 1,5% mensual y agregándole a eso cerca del 5% de incremento por las tarifas de servicios públicos.”

“Y además no debemos olvidarnos que existen las paritarias salariales, las cuales se van a encontrar en el orden del 25% al 28%”, agregó el especialista en temas económicos.

Por su parte, para el economista de FIEL, Daniel Artana, la meta es “ambiciosa pero no imposible“ en la medida en que logren que los salarios evolucionen dentro de un rango compatible con las metas. “A mi juicio la inflación va a estar arriba del 17%” dijo a radio Mitre.

"La pauta salarial debe ser consistente con las metas de inflación. No es que los salarios no pueden crecer por arriba de la inflación”, aseguró y luego acotó que “si los salarios crecen 30%, la inflación no puede ser del 15%”.

De hecho, la última encuesta empresarial de SEL Consultores las empresas líderes calculan que los aumentos salariales alcanzarán al 30% porque anticipan que el costo de vida promedio se ubicará alrededor del 25% el año que viene. Para Medina, aunque cree que el dólar puede estar por encima de $18, la cotización del presupuesto no es sería ilógica, pero no considera que el crecimiento del 3,5% sea probable. “Los datos que estamos previendo son casi los mismos que tuvimos en el año 2015; y, si la situación es cuasi similar, con el agravante que caería el consumo interno, el crecimiento no debería ser mayor al 1,8% aunque incluso podría encontrarse en el orden del 1%. Con todas estas estimaciones podemos decir que lo que poseemos hoy en la economía no es más que un tibio efecto rebote y que cuando el consumo pueda mejorar aunque sea un poco se trasladará a precios y con ello a inflación”, pronosticó el referente del FR.