La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) allanó los domicilios de dos empresas constructoras que pagaban sueldos en negro a sus trabajadores mientras vendían el metro cuadrado de edificación a 6.000 dólares.

Las empresas allanadas fueron VLQ Construcciones SA y Raghsa SA, acusadas por el organismos recaudador por por evasión previsional agravada, estimada en 3,5 millones de pesos, se informó hoy.

Una de las firmas, Raghsa, construyó los complejos Le Parc, tanto en Punta del Este, como las zonas porteñas de Puerto Madero, Palermo y en la Avenida Figueroa Alcorta, y además cuenta con 800 propiedades construidas registradas.

Los procedimientos se llevaron a cabo a pedido de la AFIP, que es querellante en la causa, y se hicieron con intervención del Juzgado Nacional en lo Penal Tributario N° 2, informó el organismo recaudador que preside Ricardo Echegaray.

La AFIP constató una serie de irregularidades durante varios operativos de relevamientos de personal realizados en obras en construcción de la empresa VLQ Construcciones SA.

Durante la fiscalización se constataron diferencias de remuneración -por horas efectivamente trabajadas comparadas con las incluidas en las liquidaciones de sueldos- y pagos extra por fuera del salario.

Además el personal relevado manifestó que facturaba a la empresa constructora como monotributista, situación que no concordaba con el tipo, habitualidad y subordinación de las tareas desarrolladas, es decir, una relación laboral encubierta.

De esa manera, las Declaraciones Juradas presentadas por el contribuyente VLQ eran "engañosas", ocultando de esta forma a la AFIP la realidad de los 256 trabajadores relevados, dijo la AFIP en un comunicado de prensa.

Por su parte Raghsa SA, titular del proyecto inmobiliario y desarrolladora de las obras fiscalizadas por la AFIP, tercerizó y subcontrató a favor de empresas de menor solvencia, en este caso VLQ SA, firma que evadió las cargas sociales de los empleados de los edificios en construcción.

La investigación de los agentes de la AFIP descubrió que la firma Raghsa SA pagaba las cargas sociales de los empleados que estaban registrados a nombre de VLQ.

El perjuicio fiscal por la maniobra de evasión suma 3,5 millones de pesos, conformados por 2,8 millones de pesos por evasión de aportes y contribuciones de la Seguridad Social durante los períodos fiscales de junio de 2011 a septiembre de 2012, y más de 700.000 pesos retenidos a los trabajadores y no depositados al fisco.